Enrique Maya estaría afectado por el llamado "sindrome de hydris", citado por el médico y político inglés David Owen en su obra "The Hybris Syndrome: Busch, Blair ant the Intoxication of Power", término que procede de la palabra griega "hybris" y que significa desmesura . Así, el pensamiento de Maya sería rígido e incorregible lo que le impele a no tener en cuenta las razones contrarias (ausencia de la necesaria empatía política para lograr acuerdos al no disponer de la necesaria mayoría absoluta) y tan sólo recogería datos o signos que le confirmaban el prejuicio para convertirlo en convicción.

Sin embargo, Maya supo encontrar las debilidades ajenas y utilizarlas en beneficio propio (falta de empatía entre Esporrín y Asirón) y así lograr el apoyo del grupo municipal socialista para la aprobación de los Primeros Presupuestos de su legislatura. Ello supuso el agigantamiento de su figura política y su posicionamiento como hombre fuerte de UPN para unas próximas Elecciones al Parlamento Foral.Sin embargo, su conducta destila una especie de delirio de grandeza que provocaba que se crea dotado de un talento y un poder extraordinarios debido a que "las deidades le habrían elegido para la alta misión de eliminar todo vestigio del legado asironiano" y en consecuencia, sigue actuando al margen de los Plenos municipales con tics autocráticos en la certeza de que siempre contará con la eterna fidelidad del PSN de Esporrín y cuyo penúltimo episodio sería su actuación unilateral al suspender oficialmente los Sanfermines del 2021 sin haber consultado previamente a la Mesa de los Sanfermines, no siendo descartable un nuevo show mediático de Maya en las próximas "no fiestas" del mes de Julio.

Germán Gorraiz